La Finca Club de Campo
94 lotes rodeados de lo que más te gusta disfrutar: Tu libertad.
Respirás profundo, una, dos y tres veces, hasta que empezás a escucharte mientras tu mirada se va lejos, más allá de los cerros que dibujan el paisaje, más allá del atardecer que querés que dure para siempre, como tu libertad.
La Finca Club de Campo
94 lotes para que cambiés de aire. Y de ritmo.
Estas donde querés estar, y conectás con todo lo que te hace sentir bien. Despertas en medio de la naturaleza sabiendo que lo tenés todo, y te sentís tranquilo. Entonces empezás a pensar que el centro sos vos.
Y sí, el centro sos vos, porque así lo pensamos.
Con vos en el medio de la nada, al alcance de todo.
La Finca Club de Campo
94 lotes para que cambiés de aire. Y de ritmo.
En medio del frenesí y la ntensidad de cada día, siempre, en algún instante pensás: ¿Existe un lugar apartado de la ciudad donde los momentos no pasen tan rápido? Un lugar sin prisa, donde el tiempo no vuele, sino que camine. Si existe. Y está en La Finca.
La Finca
Club de Campo
Área recreativa y deportiva de acceso público
Área comercial gastronómica de acceso público
SUM, área recreativa y deportiva exclusiva para socios
94 lotes de 1.225 m2 (promedio)
Viviendas multifamiliares
Red eléctrica
Agua potable
Cloacas
Gas
Alumbrado público
Red Vial y Caminería
Transporte Público
Estás donde querés estar y
Conectás con todo lo que te hace sentir bien,
despertás en medio de la naturaleza.
Estás donde querés estar y
Concectás con todo lo que te hace sentir bien
Despertás en medio de la naturaleza
El centro sos vos, porque así lo pensamos.
Con vos en el medio de la naturaleza, al alcance de todo.
Estás donde querés estar y
Concectás con todo lo que te hace sentir bien
Despertás en medio de la naturaleza
¿Existe un lugar apartado de la ciudad donde los momentos no pasen tan rápido?
Un lugar sin prisa, donde el tiempo no vuele, sino que camine.
Sí existe. Y está en La Finca.
¿Existe un lugar apartado de la ciudad donde los momentos no pasen tan rápido?
Un lugar sin prisa, donde el tiempo no vuele, sino que camine.